El bajista, cantante, y compositor Dennis Ward (PC 69, Unisonic), quien también hace las veces de
productor vuelve a darnos un nuevo disco
de Khymera bajo el nombre de “The Grand Design”. Siete años han
pasado desde la edición de “The Greatest
Wonder”, el último álbum del proyecto que lo tiene tras el micrófono
desde el segundo disco “A New Promise”,
ya que el primero autotitulado tuvo a Steve
Walsh, el fenomenal cantante de Kansas.
Las condiciones vocales de Dennis Ward fueron mejorando y en éste nuevo disco se nota el
resultado (o la magia del estudio) donde podremos escuchar una voz más suelta y
con matices que antes no tenía.
“The Grand Design”
a nivel compositivo no propone cambios comparándolos con los álbumes anteriores,
se mueven dentro de un rock melódico con una fuerte presencia de los teclados y
apostando a estribillos explosivos.
Para levantarse y aplaudir de pie tenemos: Dos joyas de AOR
como “Tell
Me Something” y “A Nigth To Remember”, luego nos vamos a “Land
Of Golden Dreams” donde encontramos la mejor grabación vocal de nuestro amigo
Dennis Ward, que se anima a vestirse de David
Coverdale. En “The Grand Design” (la canción) se puede degustar un sabor al
AOR de Giuffria, sobre todo por el
papel de los teclados de Erick Ragno
y en la power ballad del álbum “Streetlights”, donde nuevamente la voz se lleva todas las palmas y al igual que Bob Catley (Magnum) o Darren
Wharton (Dare), Dennis Ward nos demuestra que se puede cantar una balada y emocionar sin llegar a notas
altas.
Le levantamos el pulgar como gesto de aprobación (nada más) a: “Never Give Up On You” con un estilo similar a Signal, “I Believe” que se salva
de caer al vacío gracias a un magnifico estribillo, al igual que “Finally”
y con “Say What You Want”, hallamos una balada pop con la que uno se encariña
rápidamente.
Por último las que están en deuda: “She´s Got The Love” y “Who
Foolings You”, que tienen momentos interesantes pero no terminan de explotar
y finalmente nos queda la anémica balada “Where Is The Love” que cierra el álbum,
donde dentro de sus posibilidades Dennis Ward
da todo, aunque si uno la piensa con otro cantante, probablemente le sacaría mas jugo.
El balance final deja a la vista un muy buen disco de hard rock
/ AOR , que carece de la majestuosidad del debut y de “The Greatest Wonder”, pero no deja de ser una muestra del amor que
Dennis Ward tiene con el rock melódico y lo bien que lo conoce.
Reseña: Diego Gonzalez
- PUNTAJE: 7,50 / 10 -
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