El disco más esperado por todos los que gustamos del metal progresivo ya se encuentra disponible. El primer disco de Dream Theater sin Mike Portnoy, el baterista, el alma y el motor, el tipo que lleva tatuado el logo del grupo en uno de sus brazos, su padre fue quien bautizo a la banda, y podría enumerar una larga lista de cosas que Portnoy hizo por Dream Theater. Fue una sorpresa para todos la decisión que tomó, luego todo se embarró un poco cuando aparentemente arrepentido intento volver y tuvo una respuesta negativa de parte de los miembros restantes, que se negaron a parar y quisieron seguir adelante.
Por supuesto como suele pasar en estas situaciones, la banda empieza a dividir a sus seguidores, esto pasó siempre, cuando Gabriel se fue de Genesis, cuando Ozzy dejo Sabbath, y así podría citar muchos ejemplos de bandas que sufrieron la partida de un miembro esencial y carismático, como lo era Portnoy, pero todo pasa, a Collins le fue muy bien con Genesis y a Dio con Sabbath. De todas maneras no creo que tenga sentido comparar a Mike Mangini con Portnoy, no está en discusión que ambos son dos bateristas tremendos, súper técnicos, algunos dirán (y creo están en lo cierto), que Mangini es superior como músico, pero Portnoy dejó un sello, un sonido, una forma de tocar que le daba identidad al grupo.
“A Dramatic Turn Of Events”, no tiene a Portnoy, pero tiene lo mejor de Dream Theater en muchos años. Vale aclarar antes de poner los ojos en el nuevo integrante, que el material ya estaba compuesto cuando se unió al grupo, por lo que creo, poco y nada habrá aportado a estas nuevas canciones, aunque demuestra que esta a la altura de lo que la banda necesitaba. Este nuevo disco podríamos catalogarlo como una cruza entre lo sinfónico de “Images & Words”, lo progresivo de “Metropolis Part. II: Scenes From A Memory”, con algo de “Octavarium” haciendo referencia al sonido que venían teniendo los discos del grupo en los últimos años. Se nota - pero no se extraña - la falta del costado “heavy” que Portnoy le impregnaba al grupo, aportando sonidos nuevos y actuales del metalcore, death como así también del pop Inglés. Ahora las riendas las lleva John Petrucci, quien participa de la composición de todas las canciones y es el autor de casi todas las letras del álbum. Los demás integrantes lo sigues desde atrás, Rudess se transformó en su mano derecha, y en esta ocasión vamos a encontrar mas participación de James Labrie y de John Myung, que estaban algo relegados en los últimos discos.
Vamos a adentrarnos en el nuevo material:
“On A Back Of Angels”: Es la apertura, el single de difusión que desde hace unos meses venimos saboreando y nos adelantaba por donde iba a transitar la banda en esta nueva etapa.
“Build Me Up, Break Me Down”: Me recordó bastante al material solista de James Labrie de los últimos discos, de estructura simple, pesada y de sonido actual, pero con un estribillo que seguramente en vivo será acompañado por la muchachada a más no poder.
“Lost Not Forgotten”: El aroma a “SFAM” se percibe en las partes instrumentales, ésta es sin dudas una de las canciones más logradas, con una gran intervención de Jordas Ruddes, y aquí podemos empezar a escuchar al Mangini que seguramente en el próximo disco se soltara e intervendrá mas, esperemos…
“This Is The Life”: Acá bajamos unos cambios, el buen gusto para las melodías Petrucci lo sigue manteniendo, y James Labrie se luce, dándole el sentimiento adecuado, dentro de las limitaciones con las que viene luchando hace varios años, las lineas melódicas recuerdan al disco que grabó con Tim Donahue "Madmens And Sinners".
“Bridge In The Sky”: Apretamos un poco los dientes y nos dejamos llevar por el riff metalero de Petrucci, ¿querían metal progresivo?, acá tienen una dosis de los pioneros, heavy, progresivo, melódico, lo más cercano que hicieron al doble “Six Degress OF Inner Turbulence”
“Outcry”: Seguimos con las canciones largas, esta no hubiese desentonado en el maravilloso “SFAM”, está en el medio de “Home” y “Beyond This Life”, acá se lucen todos, no se guardaron nada.
“Far From Heaven”: Intima, melancólica, solo James Labrie y Jordan Rudess, al mejor estilo “Vacant” de “Train of Thought”
“Breaking All Illusions”: Otra de mis favoritas, el lado sinfónico del grupo dice presente, recuerda a “Learning To Live” y a “A Change Of Seasons”, o sea, es imposible que no te vuele la cabeza.
“Beneath The Surface”: Compuesta íntegramente (música/letra) por John Petrucci, su guitarra acústica, arreglos orquestales de fondo, un solo de Rudess “a lo Wakeman” y la dulce voz de James Labrie redondean la canción más hermosa que grabaron desde “Through Her Eyes”.
Con este “A Dramatic Turn Of Events”, la banda vuelve a toparse nuevamente con un disco bisagra como lo fue, de diferente manera, “Falling Into Infinity”, quizás el disco más discutido por los fans. Se vienen muchas preguntas al terminar de escuchar este nuevo álbum, la primera y obvia es; ¿se extraña Portnoy?, y… es difícil imaginar a Rush sin Neil Peart, ¿no?, bueno acá pasa algo similar, aunque el reemplazo este a la misma altura, pero cuando un músico tiene personalidad y estilo propio, la situación es complicada, tomando la frase célebre de LA 12: "Podrán imitarnos pero igualarnos jamas”. Igualmente tiene el crédito abierto Mangini para “pelar” más en el próximo álbum, y ganarse un poco de protagonismo, ya que se nota que le hicieron pagar “derecho de piso” en la mezcla dejando la batería en un segundo plano.
No se porqué pero antes de que saliera el disco le tenia mucha fé, y sinceramente no me defraudó, era lo que esperaba, un regreso a las fuentes a lo mas virtuoso y melódico del grupo, no voy a negar que sin Portnoy da lo mismo, pero al escuchar “A Dramatic Turn Of Events”, estoy seguro que con Portnoy este álbum no se hubiese grabado. Como es costumbre en la actualidad, tenemos ediciones para elegir, en este caso hay un box con todo el lujo, una doble cd/dvd que incluye el documental "The Spirits Carries On" (sin subtítulos) y la simple, y un dato no menor, el arte del álbum estuvo a cargo de Hugh Syme (Rush).
Petrucci & cía demostraron que pueden mantener viva a la banda sin Mike Portnoy, por caminos separados van ambos, aunque estoy seguro que en algún momento los volveremos a ver unidos.
Por supuesto como suele pasar en estas situaciones, la banda empieza a dividir a sus seguidores, esto pasó siempre, cuando Gabriel se fue de Genesis, cuando Ozzy dejo Sabbath, y así podría citar muchos ejemplos de bandas que sufrieron la partida de un miembro esencial y carismático, como lo era Portnoy, pero todo pasa, a Collins le fue muy bien con Genesis y a Dio con Sabbath. De todas maneras no creo que tenga sentido comparar a Mike Mangini con Portnoy, no está en discusión que ambos son dos bateristas tremendos, súper técnicos, algunos dirán (y creo están en lo cierto), que Mangini es superior como músico, pero Portnoy dejó un sello, un sonido, una forma de tocar que le daba identidad al grupo.
“A Dramatic Turn Of Events”, no tiene a Portnoy, pero tiene lo mejor de Dream Theater en muchos años. Vale aclarar antes de poner los ojos en el nuevo integrante, que el material ya estaba compuesto cuando se unió al grupo, por lo que creo, poco y nada habrá aportado a estas nuevas canciones, aunque demuestra que esta a la altura de lo que la banda necesitaba. Este nuevo disco podríamos catalogarlo como una cruza entre lo sinfónico de “Images & Words”, lo progresivo de “Metropolis Part. II: Scenes From A Memory”, con algo de “Octavarium” haciendo referencia al sonido que venían teniendo los discos del grupo en los últimos años. Se nota - pero no se extraña - la falta del costado “heavy” que Portnoy le impregnaba al grupo, aportando sonidos nuevos y actuales del metalcore, death como así también del pop Inglés. Ahora las riendas las lleva John Petrucci, quien participa de la composición de todas las canciones y es el autor de casi todas las letras del álbum. Los demás integrantes lo sigues desde atrás, Rudess se transformó en su mano derecha, y en esta ocasión vamos a encontrar mas participación de James Labrie y de John Myung, que estaban algo relegados en los últimos discos.
Vamos a adentrarnos en el nuevo material:
“On A Back Of Angels”: Es la apertura, el single de difusión que desde hace unos meses venimos saboreando y nos adelantaba por donde iba a transitar la banda en esta nueva etapa.
“Build Me Up, Break Me Down”: Me recordó bastante al material solista de James Labrie de los últimos discos, de estructura simple, pesada y de sonido actual, pero con un estribillo que seguramente en vivo será acompañado por la muchachada a más no poder.
“Lost Not Forgotten”: El aroma a “SFAM” se percibe en las partes instrumentales, ésta es sin dudas una de las canciones más logradas, con una gran intervención de Jordas Ruddes, y aquí podemos empezar a escuchar al Mangini que seguramente en el próximo disco se soltara e intervendrá mas, esperemos…
“This Is The Life”: Acá bajamos unos cambios, el buen gusto para las melodías Petrucci lo sigue manteniendo, y James Labrie se luce, dándole el sentimiento adecuado, dentro de las limitaciones con las que viene luchando hace varios años, las lineas melódicas recuerdan al disco que grabó con Tim Donahue "Madmens And Sinners".
“Bridge In The Sky”: Apretamos un poco los dientes y nos dejamos llevar por el riff metalero de Petrucci, ¿querían metal progresivo?, acá tienen una dosis de los pioneros, heavy, progresivo, melódico, lo más cercano que hicieron al doble “Six Degress OF Inner Turbulence”
“Outcry”: Seguimos con las canciones largas, esta no hubiese desentonado en el maravilloso “SFAM”, está en el medio de “Home” y “Beyond This Life”, acá se lucen todos, no se guardaron nada.
“Far From Heaven”: Intima, melancólica, solo James Labrie y Jordan Rudess, al mejor estilo “Vacant” de “Train of Thought”
“Breaking All Illusions”: Otra de mis favoritas, el lado sinfónico del grupo dice presente, recuerda a “Learning To Live” y a “A Change Of Seasons”, o sea, es imposible que no te vuele la cabeza.
“Beneath The Surface”: Compuesta íntegramente (música/letra) por John Petrucci, su guitarra acústica, arreglos orquestales de fondo, un solo de Rudess “a lo Wakeman” y la dulce voz de James Labrie redondean la canción más hermosa que grabaron desde “Through Her Eyes”.
Con este “A Dramatic Turn Of Events”, la banda vuelve a toparse nuevamente con un disco bisagra como lo fue, de diferente manera, “Falling Into Infinity”, quizás el disco más discutido por los fans. Se vienen muchas preguntas al terminar de escuchar este nuevo álbum, la primera y obvia es; ¿se extraña Portnoy?, y… es difícil imaginar a Rush sin Neil Peart, ¿no?, bueno acá pasa algo similar, aunque el reemplazo este a la misma altura, pero cuando un músico tiene personalidad y estilo propio, la situación es complicada, tomando la frase célebre de LA 12: "Podrán imitarnos pero igualarnos jamas”. Igualmente tiene el crédito abierto Mangini para “pelar” más en el próximo álbum, y ganarse un poco de protagonismo, ya que se nota que le hicieron pagar “derecho de piso” en la mezcla dejando la batería en un segundo plano.
No se porqué pero antes de que saliera el disco le tenia mucha fé, y sinceramente no me defraudó, era lo que esperaba, un regreso a las fuentes a lo mas virtuoso y melódico del grupo, no voy a negar que sin Portnoy da lo mismo, pero al escuchar “A Dramatic Turn Of Events”, estoy seguro que con Portnoy este álbum no se hubiese grabado. Como es costumbre en la actualidad, tenemos ediciones para elegir, en este caso hay un box con todo el lujo, una doble cd/dvd que incluye el documental "The Spirits Carries On" (sin subtítulos) y la simple, y un dato no menor, el arte del álbum estuvo a cargo de Hugh Syme (Rush).
Petrucci & cía demostraron que pueden mantener viva a la banda sin Mike Portnoy, por caminos separados van ambos, aunque estoy seguro que en algún momento los volveremos a ver unidos.
¡¡Felicidades por tu crítica Diego, muy acertada y detallada!!
ResponderEliminarMe lo compré y solamente lo he escuchado 4 veces de arriba a abajo, pero suena mucho más fresco y variado que sus 2 últimos discos (para mi gusto demasiado Metal).
De entre lo mejor de 2011, junto a los inmensos GRACE FOR DROWNING de Steven Wilson, TESTIMONY 2 de Neal Morse, OCTOPUS de Amplifier, HERITAGE de Opeth y ROAD SALT TWO de Pain of Salvation.
Por detrás estarían:
MAMMOTH de Beardfish
BILATERAL de Leprous
WARS OF THE ROSES de Ulver
IN A PERFECT WORLD de Karmakanic
WELCOME TO MY DNA de Blackfield
Es solo mi humilde opinión...
¡¡...saludos!!
Isaak
Gracias por comentar Isaak!!
ResponderEliminarSeguro estara entre mis discos del año !
un abrazo
Diego